REforestación y REplanificación Urbana (1)

 

Reforestar

El 92% de la población mundial está expuesta a niveles peligrosos de contaminación del aire según la OMS.
Estiman que se necesita, al menos, un árbol por cada tres habitantes para respirar un mejor aire en las ciudades y un mínimo de entre 10 y 15 metros cuadrados de zona verde por habitante. 
En Arica solo contamos con 4 metros cuadrados de áreas verdes por persona! 

Mejor ni preguntar cuántos árboles por habitante.

¿Cuántos árboles ve Ud.?
Esta postal es la que se repite en cualquier población de Arica.

La flora urbana tiene un papel fundamental en la calidad de vida de las personas. No solo porque mitigan de manera notable los impactos medioambientales, sean naturales o por la acción humana, sino porque tienen el poder de transformar positivamente las vidas de los habitantes.

Tener solo 10 árboles más en cada manzana, mejoran la percepción de salud y bienestar de los vecinos. Produce el mismo nivel de bienestar como si aumentáramos considerablemente nuestras remuneraciones, o si nos sintiéramos 7 años más jóvenes.
Este fue el resultado de estudios realizados en Toronto, Canadá. No es retórica de candidato.  
Las ciudades deben cumplir con su fin natural y ser espacios donde las personas puedan VIVIR. Por eso soy de los que piensa que debemos transformarlas respetando esta esencia natural y primaria. Buenos lugares para vivir en vez de resumideros de población, anarquía urbanística y espacios al servicio del ladrillo y cemento.

Sueño, al igual que Ud., en transformar Arica en una ciudad llena de zonas verdes, en una ciudad realmente sostenible, saludable y acogedora donde vivir sea una experiencia agradable, para todos, de una vez. 

La FAO prevé que para el año 2050 unos 6000 millones de personas, es decir, el 70 % de la población mundial, vivirá en ciudades.
Arica crecerá, y ya lo está haciendo.
Por eso este es el momento en que RE pensemos este crecimiento y analicemos la ciudad, la región de futuro que pretendemos.
Anticiparse en la planificación.
Una ciudad que crece y lo hace inteligentemente, integra desde el inicio los árboles urbanos y los espacios verdes. Autoridades y funcionarios comprometidos se exigen aún más que lo que señalan los manuales técnicos de urbanismo. Crean instrumentos públicos para que la meta sea el máximo y no el mínimo., incluso, firmando ordenanzas y decretos municipales.

Yo opino que debemos cambiar la Ecuación en las obras y construcciones:
Necesitamos más árboles y jardines y menos cascos blancos y arreglines.

Por años en Arica se ha mantenido la inercia y terminan añadiéndolos de mala manera y a última hora. Por cumplir.

Un árbol tarda entre 10 y 20 años en crecer y madurar.
Al parecer hay tipos de palmas de desarrollo más rápido, suficiente para que el político que las plantó reciba los aplausos.
Este crecimiento urbano de Arica debería integrar de forma anticipada pero también ingeniosa árboles, jardines, plazas y parques urbanos.
Terminar con la DESPLANIFICACIÓN urbana actual, no solo inyectando una mayor cantidad de recursos económicos, sino que hacerlo de forma inteligente. Detrás de un PLAN MAESTRO DE REFORESTACIÓN urbana.
Los árboles urbanos son claves en el desarrollo de todas las ciudades. Los indicadores de arbolado y espacio verde urbano son ineludibles en cualquier planificación urbana, pero a paso rápido. A marcha forzada como dicen los soldados y no al ritmo tortuguesco con que, hasta acá, han actuado las autoridades a cargo. Todas.
La clave siempre será disponer de personas que piensen más en el futuro que en el presente o en el pasado.
Esa responsabilidad no es enteramente de quienes están hoy día a cargo.
La primera gran responsabilidad es nuestra, de los vecinos y ciudadanos de nuestra región.
No podemos seguir respaldando figuras que emergen cada 4 años para las elecciones, prometiendo las pirámides de Giza cuando sabemos que terminan haciendo montañitas de arena en la playa.
Elegir bien no es una apuesta, es un acto de confianza informada.
Arica te quiero verde, pero Verde Esperanza.